kuakroFans:

lunes, 11 de julio de 2011

Un viejo ciego y gruñón

Por Peluka kuakro

Un viejo ciego y gruñón
En un barrio antiguo, vivía un anciano ciego, llamado Matías y su nieto Juan. El abuelo Matías siempre se quejaba de su nieto, se quejaba de que no hacia nada, de que era un holgazán, de que sería mejor vivir solo.
Juan no le decía nada porque su abuelo era ciego y era la única familia que tenía, sus padres fallecieron cuando el era niño y se quedó solo con su abuelo, Matías siempre paraba en el cuarto de su casa escuchando la radio, era un hombre solitario, su nieto hacia los quehaceres de la casa mientras su abuelo le gritaba ¡esta casa debe de estar hecha un asco, nunca limpias jovencito del demonio, nunca!
Juan era un joven trabajador, mantenía a su abuelo con lo que ganaba de su trabajo, Juan también era un hombre solitario, ya que solo le dedicaba tiempo a su abuelo y a sus cuidados, nunca había salido con su abuelo a caminar y nunca había hablado con él de nada, Juan pensaba de que su abuelo lo odiaba, pero eso no le importaba a él, porque el lo quería mucho.
Un día Juan, decidió salir con su abuelo a caminar ya que nunca salían, Matías se negaba a salir pero al final aceptó, Juan y Matías salieron de la casa para caminar por las calles y tomar un poco de aire fresco, se divirtieron mucho y por primera vez Matías sentía un cariño por su nieto Juan, los dos, ya cansados decidieron volver a casa, en el transcurso comenzaron a hablar de la familia y Juan le preguntó ¿Por qué me odias abuelo? Matías le respondió, no te odio hijo, solo te digo lo que debes hacer, eso es diferente. Juan pensó en decirle que él hacia todo lo de la casa, que él lo cuidaba, pero decidió guardarlo para otro momento.
De pronto el abuelo Matías cayo al suelo y comenzó a gritar ¡Niño del demonio, como te atreves a empujarme, soy tu abuelo, que te has creído! Las personas que estaban alrededor ayudaron al abuelo a levantarse, Matías molesto preguntó ¿¡Donde esta es muchachito del demonio, que se ha creído?! Las personas miraron al abuelo histérico y un hombre de barba castaña se acercó a Matías y le dijo al oído, “Su nieto acaba de ser atropellado, él lo empujo un segundo antes, para que el automóvil no lo atropellara a usted”
Un dolor inmenso lo invadió y una lagrima bajo por la mejilla derecha de Matías, recorriendo su arrugado y viejo rostro, por primera vez Matías sentía amor, pero ese amor estaba acompañado del dolor.

Si tienes a una persona a tu lado que se preocupa por ti dale las gracias, dile lo que sientes, antes de que sea demasiado tarde.

No hay comentarios:

Publicar un comentario